Benjamín

Ramírez Martínez

Proveniente de una familia dedicada a la construcción, Benjamín Ramírez (Cuenca, 1979) entró en contacto con el oficio de la cantería y la escultura motivado por la carencia en este tipo de trabajos en su provincia. Así, comenzó como aprendiz en un pequeño taller toledano, en San Pablo de los Montes. A las órdenes de un maestro escultor que le acogió como aprendiz recibiría toda la técnica y sabiduría del oficio. A medida que tomaba contacto con la herramienta y el material sintió gran soltura y habilidad. Cada trabajo suponía un reto, un camino abierto a la exploración que ponía a prueba su destreza para dibujar, para observar el comportamiento de los materiales o la exigencia para usar determinadas herramientas según el acabado perseguido. Así transcurrieron cinco años. Cuando tuvo la oportunidad (2004) abrió las puertas de su propio taller en su pueblo (Las Pedroñeras). Aquí lleva ejerciendo esta profesión desde hace 23 años, sucediéndose numerosos trabajos de cantería aplicada a la construcción (fachadas, revestimientos, elementos constructivos sustentantes y ornamentales…), restauración del patrimonio u obras públicas. Más tarde, al considerarse heredero de una tradición, Benjamín creó Da Capo Escultura (2020), una línea cuyo objetivo ha sido revalorizar el oficio por medio de trabajos escultóricos atemporales (originales y réplicas) donde artesanía y diseño conviven en armonía. Se trata de adaptarse a los tiempos y estimular la creatividad, de innovar sin desprenderse de la identidad que ofrece el trabajo artesanal.